lunes, 21 de mayo de 2012

Justicia fiscal.

John Rawls, uno de los filósofos más importantes del Siglo XX, propició una reactivación de la filosofía política a partir de su obra “Teoría de la Justicia”, publicada en 1971, en la que a partir del análisis y crítica de las teorías liberales tradicionales, en especial el utilitarismo, pretende reconciliar el problema a su juicio más grande del liberalismo: reconciliar la libertad y la igualdad del individuo, es decir, dar una respuesta razonable, convincente al problema de conformar una sociedad en la cual los individuos a la vista de la justicia sean iguales. Existen ciertas diferencias específicas tales como intereses propios, desigualdades sociales, e incluso de adherencia a diversos fijes o concepciones del bien o como las llama el propio autor: diberentes doctrinas comprensivas.
Sentadas las bases de la deliberación racional que ha de dar como resultado los principios de justicia, resulta conveniente estudiar cómo el advenimiento del Estado Social de Derecho ha traído consigo el aumento de las diversas actividades de la Administración Pública así como una extensa y compleja organización administrativa y fiscal, esto con la finalidad de alcanzar la satisfacción de los intereses públicos. Es por ello que se busca un equilibrio entre el poder público y las libertades de los gobernados, resultando necesario hablar de la justicia fiscal desde un punto de vista realista.
Las leyes en materia fiscal en México no fomentan en la población el pago de impuestos en virtud de su complejidad y constante modificación. El problema se manifiesta desde que el contribuyente ingresa al Registro Federal de Contribuyentes, pasando por el alto un gran número de impuestos que se deben declarar, así como la aplicación de las normas fiscales.
Asimismo, se percibe como ineficaz el sistema tributario. Se presume la existencia de sectores económicos que reciben un trato preferencial, y en general no hay confianza en las autoridades fiscales con respecto al destino que tienen los impuestos.
Otro problema de trascendencia es la evasión y en consecuencia la impunidad de ésta. De acuerdo con cifras de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, cuatro de cada diez mexicanos que deberían pagar impuestos no lo hacen. Es por ello que es necesario crear una cultura contributiva con el objeto de romper las conductas viciosas de evasión fiscal y desconfianza, que en materia tributaria entorpece las posibilidades de desarrollo del país.
Sin embargo, la impartición de justicia juega un papel determinante porque requiere de profundos conocimientos jurídicos, de una rectitud moral y fuerza que le permita al juzgador tener esas cualidades para dotar a sus semejantes de la estabilidad y paz social que busca el Estado Moderno.
En nuestro país se ha seguido de una manera consistente, a partir de la Ley de Justicia Fiscal de 1936, el sistema continental europeo que se inspiró en el Estado Francés, el cual aplica desde 1789, encuadrando al juicio contencioso administrativo en el seno de la Administración Pública. Bajo éste contexto se observa que los orígenes de este juicio en México, surge a partir de dos ideas opuestas, una parte de la influencia del Estado Francés y otra del Sistema Anglosajón.
El Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa es un Tribunal autónomo, y de plena jurisdicción, y como resultado del análisis de su competencia material, tiene amplia competencia en diversas materias (fiscal, administrativa, comercio exterior, propiedad intelectual, etc.) y en diferentes procedimientos que se llevan a cabo ante él.
El Tribunal se ha caracterizado por tener eficacia plena al momento de dictar sus fallos, prevaleciendo en la mayoría de las veces la prontitud y eficiencia dentro de sus Salas encabezadas por los Magistrados, sin embargo sigue siendo indispensable la carrera judicial, ya que con ella se busca una mayor eficiencia y eficacia en el cumplimiento de los objetivos institucionales, por lo que, a través de ella es como el TFJFA, ofrecerá a la sociedad mejores servicios para acceder a una mejor impartición de la justicia de manera pronta y expedita, y sobre todo confiable.
David Salinas.

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