jueves, 7 de abril de 2011

¿Qué es la Política?


La política se basa en el hecho de la pluralidad de los hombres,  de los hombres considerados como un producto humano, terrenal, y producto de la naturaleza.

La política trata de estar juntos, los unos con los otros,  los hombres, diversos entre si se organizan políticamente según determinadas comunidades esenciales, logrando un caos absoluto, o por que no a partir de un caos absoluto de las diferencias.

Es a partir de estas observaciones que vemos como Hannah Arendt considera que la filosofía tiene  dos buenos motivos para no encontrar nunca el lugar de donde surge la política.

a).  El zoon politikon de Aristóteles concebido en su política aseveraba que el hombre tenía dos cualidades, primeramente ser un animal político y el segundo el hecho de ser un ser sociable, por naturaleza.

La idea de animal político para Arendt es errónea ya que en la esencia del hombre no hay algo político que perteneciera a su esencia, pues si partimos del hecho de que la política es acerca de estar juntos el hombre sería apolítico.

La noción de la política nace de “entre” los hombres por lo tanto completamente fuera del hombre. De ahí que no haya ninguna sustancia propiamente política. La política surge en el entre y se establece como relación.

Así lo entendió Hobbes, cuando observa que el hombre es el lobo del hombre, para él, el hombre es igual respecto a la consecución de sus fines, de ahí que si dos hombres desean la misma cosa, y en modo alguno pueden disfrutarla ambos, se vuelven enemigos y en el camino que conduce al fin (el cual es principalmente su propia conservación tratan de aniquilarse o sojuzgarse el uno al otro, así hallamos en la naturaleza del hombre tres causas principales de la discordia, a decir la competencia, la desconfianza y por último la gloria.

b).  La representación monoteísta de Dios, a cuya imagen y semejanza debe haber sido creado el hombre. De esto que solamente pueda haber el hombre, los hombres son una repetición más o menos afortunada del mismo.
 Es la guerra de uno contra todos los otros que son  odiados por que existen sin sentido para el hombre creado a imagen de la soledad de Dios.

Ahora bien Arendt considera que hoy hay muchos prejuicios ante la política, muchos de ellos fundados, puede que sea por los prejuicios del mundo moderno la imposibilidad de juzgar lo que ha sucedido y sucede cada día, según unos criterios firmes y reconocidos por  todos, de subsumirlo como caso de un universal bien conocido, unido estrechamente a la dificultad de ofrecer principios de acción para lo que deba de suceder, se describa con frecuencia como un nihilismo inherente a la época, como una desvaloración de todos los valores, una especie de ocaso de los dioses y catástrofe del orden moral del mundo.

Para Arendt el sentido de la política es la libertad, su simplicidad y contundencia reside en que es exactamente tan antigua, no como la pregunta, que naturalmente ya surge de una sospecha, y esta inspirada en la desconfianza, sino como la existencia de lo político.

Para comprender el concepto político de libertad tal como originalmente aparece en la polis griega es de gran importancia determinar el estrecho vinculo de lo político con lo homérico.

Esto no solamente por que Homero fuera educador de la polis sino por que también  la comprensión que da de si mismo  estaba íntimamente ligada a aquellas experiencias presentes en el. Así el concepto central de polis libre no dominada por ningún tirano, y los conceptos de isonomía e isegoria se remitían sin dificultad a los tiempos homéricos.

Arendt ha insistido en regresar a los tiempos griegos, aspecto que es retomado por Mouffe y que posteriormente podremos observar en el análisis del retorno de lo político.

Para concluir es conveniente observar que Arendt al referirse a la ley en si misma sostiene que tiene algo de violento tanto por lo que respecta a su surgimiento como a su esencia.

La ley ha surgido de la producción no de la acción, el legislador es igual que el urbanista y el arquitecto, no que el hombre de Estado y ciudadano. La ley produce el espacio de lo político y contiene por lo tanto lo que de violento y violentador tiene todo producir.

No hay comentarios:

Publicar un comentario